jueves, 13 de noviembre de 2008

Tarjetas inteligentes y maestros tontos


En la página del Ministerio de Educación, se publicó una nota en la que se dice que Raúl Vallejo Corral, Ministro de Educación, ha aprobado que se reconocerá a una tarjeta inteligente, que será un carné estudiantil.


Sin embargo, para aprobar esta ley se requiere que los planteles educativos de Quito aprueben y contraten el servicio, que al reverso tendrá un operador tecnológico que brindará a los estudiantes beneficios en cuanto a transporte público y demás.


Los estudiantes que podrán beneficiarse con esta tarjeta inteligente, serán los que pertenecen a planteles fiscales, particulares, fiscomisionales y municipales, de niveles octavo, noveno y décimo.
El valor de la tarjeta será de USD 1.50, y deberá ser entregado en un máximo de 60 días. De igual manera, este “Acuerdo Ministerial se amplía a 45 días el plazo para la contratación de la impresión de los carnés ene el resto del país”.


Esta tarjeta inteligente, claro, beneficia a los estudiantes de colegio. Lastimosamente los universitarios no tenemos los mismos beneficios, y más bien nos cobran más caro en el bus si es posible. Me parece que, por cuestiones de derechos comunes, todos los estudiantes, TODOS, debemos gozar de los mismos beneficios.


Además, la revolución por la nueva Constitución ha puesto los pelos de punta a muchos. Ahora sí buscan profesionales que sepan bien lo que enseñan, bien letrados, bien preparados.
Pero yo conozco cierto Colegio de Quito, también aclamado Club, cuyo nombre no rebelaré. Los directivos de dicha institución son gente que logra llegar a altos puestos por sus palancas personales, porque el marido trabaja ahí, porque el dueño es el pana… el cargo de vicerrector está siendo desenvuelto por una persona que no sabe ni prender un computador, y enseña Dibujo Técnico a chicos de sexto curso con reglas y pliegos de cartulina, pero no sabe utilizar el Auto Cad, ni siquiera sabe qué es.


La educación está avanzando, es cierto, pero hay instituciones que se escudan en grandes nombres, y nada más, porque su método educacional es una porquería.

1 comentario:

Unknown dijo...

La verdad las tarjetas inteligentes no son una buena opción para los estudiantes del colegio. Una de las razones es que se gasta el presupuesto del Estado que puede servir para otros asuntos. La solución sería que reconozcan el derecho del estudiante sólo con su cedula de identidad. También creo que sería mejor que los estudiantes de las Universidades tengan esa tarjeta inteligente, pues la cedula de identidad no les serviría si quisiera tomar esa acción.